22 noviembre 2013

Quintueles pierde a Fran Carrio

Emotiva despedida de los vecinos de Quintueles al hostelero Fran Carrio 
23.11.13 - 00:22 - E. R. | QUINTUELES. 
Los vecinos de Quintueles arroparon ayer a la viuda y a la familia de Francisco 'Fran' Carrio Solís, artífice y propietario del mayor complejo hostelero de la zona, el popular Managua. En una fría y lluviosa tarde, más de un centenar de personas de La Marina -entre ellas, antiguos empleados del establecimiento- acudieron a la iglesia parroquial, donde se celebró el funeral, oficiado por Maximino Canal. Quisieron despedir así a un hombre «afable, extrovertido y muy atento», que a lo largo de su vida demostró ser un auténtico emprendedor, pues, además de convertirse en un referente del mundo de la hostelería, compaginaba este trabajo con la construcción de casas y chalés en la zona. 
Los familiares también recibieron telegramas de personas que, estando lejos, les transmitieron su pena por la pérdida de Fran. Entre ellos, el entrenador del Villarreal, Marcelino García Toral, vecino de Careñes. 
Natural de Langreo, a su regreso de Bruselas -a donde se había trasladado unos años junto a su mujer y donde nació su hijo Javi- Fran comenzó a idear la puesta en marcha de un establecimiento hostelero. Era 1973 y lo que comenzó siendo un edificio de Quintueles construido por él mismo como vivienda familiar vieron la luz un bar y un pequeño comedor, bautizados con el nombre de Managua. Poco a poco, se fue convirtiendo en un gran local para bodas y banquetes. En 2005, después de tres décadas de servicio, el cansancio hizo mella y el Managua bajó la persiana.
Familiares y amigos despidieron a Fran Carrio en el funeral celebrado en la iglesia de Quintueles. :: LUIS SEVILLA
Fue el artífice de un complejo hostelero de la zona, el popular Managua
 22.11.13 - 00:34 - L. RAMOS | GIJÓN. 
A su vuelta de Bruselas, el emprendedor langreano se asentó en Gijón, donde comenzó a gestar la idea de abrir un gran negocio para bodas y banquetes 
Primero fue el Managua, y ahora su creador. Quintueles perdió ayer a una figura clave de su paisanaje, Francisco 'Fran' Carrio Solís. Su trabajo en el conocido complejo hostelero, que compaginaba con la construcción de casas y chalés por la zona, hicieron de este langreano una persona querida y conocida por todos en la parroquia maliaya. Quienes le conocieron aseguran que era «afable, extrovertido y muy atento», cualidades que le ayudaron a la hora de convertir lo que comenzó como un pequeño bar en su propia casa en un complejo capaz de albergar a 1.200 personas. Todo un referente dentro del mundo de la hostelería que dirigió durante más de tres décadas junto a su mujer, Rufina Vega. 
Ambos eran muy jóvenes cuando contrajeron matrimonio, y lo hicieron en una época en la que las cosas no eran precisamente fáciles. Mientras Fran hacía malabares para cumplir con el servicio militar al mismo tiempo que trabajaba en la construcción, Rufina se formaba como modista. Fueron su juventud y la certeza de que fuera les esperaba una vida mejor las que hicieron que la pareja fuese a parar a Bruselas, donde tuvieron a su único hijo, Javi. Tras pasar varios años en la capital belga, los asturianos sintieron la llamada de la 'tierrina' y decidieron que ya era hora de regresar. 
Fue durante su estancia en Gijón cuando en la cabeza de Fran comenzó a fraguarse la idea de poner en marcha un establecimiento hostelero, aunque nunca se imaginó hasta dónde le llevaría aquella aventura. El 22 de mayo de 1973, en un edificio de Quintueles construido por él mismo como vivienda unifamiliar, vieron la luz un bar y un pequeño comedor que serían bautizados con el nombre de Managua, en memoria de las víctimas del gran terremoto ocurrido seis meses antes en la capital nicaragüense. El resto ya es historia. Llegaron las primeras bodas, y con ellas las ampliaciones, que se sucederían una tras otra, convirtiendo al Managua en una auténtica atracción turística cuyo brillo sólo pudo empañar el trágico fallecimiento, en 1981, de Javi. El mazazo a punto estuvo de echar por la borda el trabajo de tantísimos años, pero Fran y Rufina consiguieron sobreponerse poco a poco a la pérdida y el complejo continuó dando servicio 24 años más. El cansancio y la ausencia de un heredero que se hiciese cargo del negocio llevaron a Fran y Rufina a bajar la persiana del emblemático complejo hostelero en septiembre de 2005. 
A pesar del enorme éxito cosechado con el Managua, Fran nunca abandonó su primera profesión, la construcción. Actividad que compaginó durante años con la presidencia del Club de Fútbol de Quintueles. 
El funeral tendrá lugar hoy, a las 16.30 horas, en la iglesia parroquial de Quintueles, desde donde el difunto será trasladado al Tanatorio de Cabueñes para ser incinerado.
Fran Carrio junto a su mujer, Rufina Vega, durante un homenaje recibido por su ingente labor. :: L. C.


Vista general del Managua. Además de la zona reservada para banquetes y comidas, disponía de dos piscinas, pista de tenis y merendero. :: L. C.